Este 27 de septiembre, a las 12h, en Madrid, más de 50 asociaciones y plataformas
vecinales de toda España se concentrarán para exigir la paralización de los proyectos de
macro-plantas de biogás y biometano que amenazan a nuestros pueblos, nuestra salud y
nuestros recursos naturales.
Estas instalaciones, promovidas como “energía verde”, esconden una realidad muy diferente:
procesan todo tipo de residuos contaminantes como purines de macro-granjas, lodos de
depuradora, cadáveres de animales, subproductos de matadero, alperujos y desechos
industriales. El resultado es un digestato cargado de metales pesados, bacterias resistentes y
nitratos, que terminan usándose cómo supuestos fertilizantes, esparciéndose en los campos,
filtrándose a los acuíferos. Y así es cómo el digestato acaba en nuestro plato.
Lejos de solucionar el problema, lo agravan: más contaminación, más emisiones y más riesgos
para la salud pública.
Supuestos fertilizantes que, esparciéndose en los campos, terminan filtrándose a los acuíferos
A esto se suma un hecho preocupante: en España no existe ni una ordenación territorial ni
una legislación específica que regule estas macro-plantas. Así, los ayuntamientos que abren
la puerta a esta macro-industria terminan aceptando más de una planta en su término
municipal, sin evaluar los impactos acumulativos. Nadie sabe qué ocurrirá cuando convivan
varios proyectos en pocos kilómetros de distancia y, aun así, las administraciones siguen
adelante, como si se tratara de una carrera de fondo donde lo único que importa es acelerar
aprobaciones para tener dinero público.
Además, la Administración pública está favoreciendo a empresas privadas, declarando estos
proyectos de “interés público” para saltarse filtros de inspección, participación ciudadana e
impuestos. Todo ello sin transparencia ni escucha a los vecinos. Hay pueblos a los que se les
niega acceder o descargarse el proyecto de la macro-planta. ¡Y luego nos hablan de democracia y transparencia!
En muchas Comunidades Autónomas, incluso, exigen a los interesados que han puesto
alegaciones a los proyectos que se justifiquen como interesados, siendo proyectos a exposición
pública.
Contaminación de acuíferos y pérdida de fertilidad en la tierra
El despliegue masivo de macro-plantas de biogás puede convertirse en un desastre ambiental
de dimensiones incalculables, comparable a la falta de previsión y mala gestión que permitió
que los incendios arrasaran miles de hectáreas en España en los últimos veranos. Así como
los incendios no fueron una catástrofe natural inevitable, sino el resultado de políticas
equivocadas y de abandono rural, este modelo energético impuesto desde arriba es una chispa
que amenaza con prender en nuestros pueblos: contaminación de acuíferos, pérdida de
fertilidad en la tierra y expulsión de la población.
Hoy tenemos la oportunidad de no repetir los errores del pasado. No podemos esperar a que
los daños sean irreversibles para actuar.
La coordinadora Stop Biogás España recuerda que lo que está en juego es el futuro del mundo
rural:
• Agua potable libre de contaminantes.
• Tierra fértil para producir alimentos de calidad.
• Aire limpio y saludable para las próximas generaciones.
• Un modelo energético descentralizado, justo y sostenible.
Exigimos:
Respeto al mundo rural y sus habitantes.
Paralización inmediata de todos los proyectos ya aprobados y por aprobar o en exposición
pública.
Prohibición de nuevas macro-granjas y ampliación de las que ya existen, ya que es una
industria altamente contaminante por la cantidad de residuos que genera, y que justifican así
la proliferación de macro industrias.
No somos tierra de sacrificio.
El 27 de septiembre, los pueblos de España levantan la voz en Madrid.
¡Ni en tu pueblo ni en el mío!